Benzema ha sido cuestionado desde el día que puso un pie en Madrid. Especialmente criticado por su falta de gol, Karim ha tenido que hacer malabares para ganarse a la afición, y aun así sigue sin haber acuerdo en las opiniones sobre el francés. Sin embargo el galo es hombre de grandes noches donde nunca falta a su cita con el gol.
El último tanto más que importante del galo fue en el Clásico del sábado. Benzema no sólo hizo un auténtico partidazo desplegando su juego, también aumentó la distancia en el marcador anotando el gol de la tranquilidad que además sería el definitivo 3-1.
Nunca se ha negado la calidad del francés ni su gran visión de juego y todo lo que aporta al equipo. Benzema juega y hace jugar. Pero siempre ha tenido algo en contra, su falta de gol. Y es que a fin de cuentas es un “nueve” y está para hacer goles. Además también su indolencia en determinados momentos del partido le ha jugado malas pasadas con el público del Bernabéu. El problema es que Benzema disfruta más dando goles que haciéndolos. En muchos casos más que un “nueve” es un “diez”.
A pesar de todo actualmente poco se le puede criticar al francés. Mantiene su nivel e importancia en el juego colectivo que ha tenido siempre pero además ha despertado su olfato goleador. Y es que no sólo marcó en el Clásico, también hizo dos importantes goles en el partido ante el Liverpool en Anfield.
Es curioso que si se echa la vista atrás se observa que estos goles en los encuentros más importantes son más que habituales en el delantero del Madrid. A pesar de las continuas críticas recibidas el francés no falla en las grandes citas.
Benzema lleva marcando en los últimos cuatro clásicos jugados en casa, un registro que sólo habían conseguido antes Santillana y Hugo Sánchez. El año pasado en la vuelta de la Liga en el Bernabéu anotó dos de los tres goles de su equipo y en tan solo cuatro minutos.
En total, Benzema ha marcado siete goles en sus 19 enfrentamientos con el Barça y además ha dado cinco asistencias.
Las semifinales de Champions son otra de sus especialidades y es que además ésta es la competición que desata su vena goleadora. Es decimotercero en lista de los mayores goleadores europeos con 40 tantos.
Marcó el año pasado ante el Bayern en casa el único tanto del partido que iniciaba el pase a la gran final. Además marcó también en las semifinales que disputó el Madrid ante el Dortmund en la temporada 12-13 en el choque de vuelta. Los blancos necesitaban tres goles para pasar y Benzema puso el primer tanto que daba esperanza aunque finalmente no se consiguió la remontada.
Al galo sólo le falta una cosa para confirmar que es el hombre de las grandes citas, de esos partidos donde se necesitan los goles más que nunca: marcar en una gran final. Desde que está en el Madrid ha disputado cinco: tres de Copa del Rey, una de Champions y la de Supercopa de Europa; y ha finalizado todas sin gol. Seguro que en la próxima que dispute querrá quitarse esa espinita.
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