A partir del análisis de cientos de conversaciones telefónicas, el juez Ariel Lijo desentrañó el vínculo entre el Vicepresidente y su presunto testaferro. Los números de celular, las personas y los contactos que confirmaron el plan para apoderarse de la imprenta de valores
Ni fotos ni videos: aunque durante meses se especuló con la posibilidad de que existiesen imágenes que mostraban juntos al vicepresidente Amado Boudou y a su presunto testaferro, Alejandro Vandenbroele, el juez Ariel Lijo no necesitó nada de eso. Apoyado en una intrincada red de cientos de llamados, la Justicia dio por probado el vínculo entre el ex ministro de Economía y el titular de The Old Fund para quedarse con la ex Ciccone Calcográfica.
La clave está en lo que el magistrado denominó la "densidad de llamadas" registradas en distintos días clave de la venta de la fábrica de hacer billetes. En su fallo, Lijo detalló las comunicaciones, los números de teléfono y la duración de las conversaciones que Boudou mantuvo con sus colaboradores, socios y allegados y los contactos que estos, a su vez, tuvieron con distintos miembros de la familia Ciccone. En el medio de esa enmarañada red siempre aparece Vandenbroele.
El fallo de 333 fojas detalla diez momentos clave en la historia de Boudou, Ciccone y The Old Fund. En los más importantes, el registro de llamados aportado por distintas compañías telefónicas resultó trascendental. El contenido de esas conversaciones no fue grabado. Pero, para el juez, eso no es necesario. La duración de las charlas, la frecuencia de los contactos y hasta el descubrimiento de que muchos celulares fueron detectados juntos en el mismo momento bajo el paraguas de una misma antena telefónica alcanzaron para sustentar la hipótesis del vínculo entre Vandenbroele y Boudou, a través de su amigo en común José María Núñez Carmona.
El primero de los hitos de la causa está fijado en los últimos días de mayo de 2009. En ese entonces operó por primera vez la "estructura empresarial (que) fue utilizada para llevar a cabo la posterior adquisición de Ciccone". "Es posible afirmar que los elementos probatorios reunidos acreditan que en el año 2009, en el marco de la reestructuración de la deuda de la provincia de Formosa, la firma The Old Fund ya estaba vinculada a Amado Boudou, José María Núñez Carmona y Alejandro Vandenbroele", sostuvo el magistrado.
El por entonces ministro de Economía modificó cuatro artículos del convenio de reestructuración de deuda que la Nación había firmado con el gobierno de Formosa. En esa renegociación, el Fondo Fiduciario Provincial contrató la consultoría de The Old Fund, una sociedad sin operaciones que había sido comprada por Vandenbroele diez días antes por apenas siete mil pesos. Por esa presunta asesoría, la sociedad se llevó más de siete millones y medio de pesos.
El 21 de mayo de 2010, día que el gobierno de Gildo Insfrán depositó la comisión, se registró una gran cantidad de llamadas entre Núñez Carmona (desde el número 1163810923) y Vandenbroele (1163810923). En esa jornada, como puede verse en el gráfico adjunto, también hubo contactos entre los teléfonos de Boudou (1167937222) y su secretario Eduardo Romano (1154925950). Pero quizás el dato más relevante es que los celulares del funcionario y de su amigo y socio Núñez Carmona fueron detectados en la misma antena de telefonía de Macacha Güemes 351.
"Permite al menos presumir que se encontraban juntos. Máxime si se tiene en cuenta que en esa cuadra tenía su lugar de residencia el ex ministro de Economía", consigna el fallo. Es decir que existen grandes probabilidades de que Boudou se hallase junto Núñez Carmona mientras este hablaba con Vandenbroele. La hipótesis es más que probable: según pudo comprobar la Justicia, en esos meses, el teléfono de Núñez Carmona se activó "al menos 1215 veces en la antena de Casa Rosada que es la misma que la del ministerio de Economía". En más de mil ocasiones, estuvo apenas a metros de distancia de su socio y amigo de toda la vida.
Los intrincados métodos para que los teléfonos de Boudou no aparecieran en contacto directo con los de Vandenbroele y la familia Ciccone se repiten en al menos otros dos momentos clave en la historia de la transacción. Primero, el 26 de julio de 2010, apenas tres días antes de que el entonces ministro y Núñez Carmona se reunieran con Guillermo Reinwick, yerno de Ciccone, en los estudios de Telefé. Según los registros, 72 horas antes del encuentro hubo un incesante intercambio de llamados de no más de dos minutos entre Reinwick, Núñez Carmona y Guillermo Blanco, directivo del canal a cargo de gestionar el cara a cara. En ese incesante ir y venir de conversaciones quedó registrado un diálogo de 60 segundos entre Agustina Kämpfer (desde el número 1156161981) con el teléfono de Núñez Carmona (2235216663). De acuerdo a los registros, la novia del Vicepresidente y su pareja estaban en ese momento bajo la cobertura de la antena de Macacha Güemes 351. Lo más probable es que ambos se encontrasen juntos en el departamento en que conviven.
Una estructura similar de llamados se repitió el 1° de septiembre de 2010. Según el fallo, días antes el hoy difunto Héctor Ciccone dudaba si firmar el acuerdo que le entregaría el 70% de la imprenta a The Old Fund. Para mayores garantías, pidió ver al Vicepresidente junto a su hermano Nicolás Ciccone. Las partes acordaron reunirse en el restaurante i Fresh Market de Puerto Madero. Esa jornada, desde las 8:47 hubo llamadas entre Agustina Kämpfer y Núñez Carmona. Para el juez, Boudou utilizaba en ese momento el celular de su novia. Cinco minutos después, Vandenbroele llamó Reinwick y, cuatro minutos luego, él se comunicó con Olga, una de las hijas de Nicolás Ciccone. Luego, Núñez Carmona y Vandenbroele se contactaron varias veces más. En menos de media hora la reunión había sido arreglada. Ese mismo día terminó de acordarse la venta de la máquina de hacer billetes
Con el respaldo de los testimonios, los registros telefónicos, los datos de distintas transferencias bancarias y numerosa documentación oficial, el juez Lijo dio por probada la relación entre Boudou y Vandenbroele. Las imágenes no hicieron falta. "Los vínculos son sólidos y numerosos, echando por tierra cualquier afirmación que exija una foto o un video de ellos juntos que compruebe, todavía más, la relación que los unía", concluyó el magistrado.
Los abogados del Vicepresidente anticiparon que apelarán la decisión. La intrincada trama de llamados que tejió junto a Núñez Carmona y Vandenbroele en principio disimuló sus vínculos con el traspaso de la imprenta. Pero ahora todos quedaron atrapados por la red que ellos mismos se encargaron de tejer.
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