No lo tires, ¡repáralo!
Silla desequilibrada. Para estabilizar una vieja silla de madera, rebana un corcho horizontalmente y pega un trozo en el extremo de la pata problemática. ¡Así de fácil!
Rayones en la madera. ¿Estás por regalar esa mesa de madera antigua por la cantidad de “cicatrices” que tiene? ¡Aguarda! Puedes camuflar las marcas con crema para calzado. Lo mejor es que es reversible: si no te agrada el resultado, es posible removerla con alcoholes minerales. Unta un paño suave con un poco de crema de un tono similar al de la mesa y frótalo sobre el rayón hasta que desaparezca.
Tapizado rasgado. Si un invitado picó el tejido de tu sillón de microfibra con un objeto filoso, tenemos la solución. Con la plancha en temperatura baja, aplana los bordes del rasgón. Luego, da vuelta a la funda de adentro hacia afuera. Corta un trozo de cinta sesgada fusible, de un tamaño un poco más grande que el rasgón, y colócala sobre el agujero. Encima, apoya un trozo de tela de algodón, idealmente de un tono que combine con el del sillón, y plánchalo en temperatura media a alta hasta que se “funda” con el tapizado
.Tabla de madera seca. Revitaliza tu tabla de picar con aceite mineral puro (disponible en droguerías). Coloca un poco dentro de un bowl con agua caliente y pásalo suavemente por la superficie de la tabla con un paño. Entre cuatro y seis horas después, quita con un trapo el exceso de aceite.
Sillones que adoptaron tu silueta. Tienes dos opciones: eliges otra parte del sillón donde sentarte o renuevas el contenido de los almohadones. Un consejo: rota las partes del sillón regularmente, ¡para evitar que se hundan!
Almohadones aplanados. Para revivirlos, déjalos al sol durante un par de horas. Dales vuelta para que se asoleen todos sus costados, ello contribuye a que se evapore la humedad que se infiltra en el relleno de los mismos y “mágicamente” vuelven a lucir gorditos, como te gustan.
Sillas de ratán hundidas. Con el tiempo, los asientos de este material o de paja se hunden. ¡Nada que no puedas revertir! Para reajustar las fibras, moja el reverso del tejido con agua. Espera a que se seque durante la noche y repite el proceso si fuera necesario.
Cortina de baño con moho. Métela en la lavadora con algunas toallas blancas viejas, en un ciclo corto, con agua caliente y cloro. Para evitar que vuelva el moho, después de ducharte, abre la puerta o la ventana del baño por 20 minutos
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